domingo, 22 de febrero de 2009

Mediacion en divorcios y la propiedad inmobiliaria




En estos tiempos de profundo cambio, donde parece que las certezas habituales se han desintegrado, querriamos tener algo seguro, fijo, desde donde darle sentido a los procesos que estamos viviendo...Hoy querria hablar del valor del desapego.
Si hemos visto la intervencion del mediador como balanceando las necesidades de cada parte, y dandoles de este modo una legitimidad, ahora doy un paso atras y me pregunto:

Como voy a mediar en situaciones de escasez, donde la mejor solucion NO esta en darle a cada uno lo suyo, sino en crear una instancia colaborativa?

Esto viene por que oyendo a los mediadores del area, el tema de discusion esta centrado en un hecho de la realidad: si hablamos de division de bienes, pero esta no es posible pues la casa familiar no se vende, y esto obliga a las partes a seguir conviviendo? Que se hace alli?

Supongo que a Uds. tambien se les ha presentado este tema. Detras de la capacidad de divorciarse como un derecho humano, esta el derecho a disponer de los propios bienes...El mercado, hoy, tiene la ultima palabra y dice que NO! Este derecho esta limitado severamente por la crisis economica: nadie esta comprando o vendiendo inmuebles; si se pudiera encontrar un comprador, tampoco se sabria el precio, etc.

Que hace entonces un mediador? la broma corriente dice que "vamos a hablar con los psicologos de parejas y les preguntamos como hacemos para establecer reglas que ordenen esta situacion inedita: divorciados viviendo juntos..."

Alguien debe tener un manual para este tema, cierto? Pues no, nadie lo tiene!

Y ahora, como hacemos para reenmarcar esta situacion de modo que la pareja divorciada pero no tanto pueda encontrar un modo de cerrar el proceso y seguir adelante? La solucion tiene que venir de una conversacion comunitaria, donde haya ideas ofrecidas por otros profesionales, quizas.

Por ahora, el capitulo: "Division de la propiedad conyugal" esta siendo re-escrito bajo la fuerza de una realidad economica que muy pocos imaginaron dos anos atras.

Y vamos a ver otros aspectos de la crisis dificultando un divorcio rapido, con seguridad. Que otras instituciones sociales van a tener que ser re-definidas? No lo sabemos, pero es hora de conversar sobre los impactos de la crisis global en nuestras sociedades, verdad?

2 comentarios:

Carlos Urrestarazu Rodrigo dijo...

Sí, de verdad, Nora, tienes razón. Ahora los integrantes de la pareja a divorciarse no pueden acceder ni a préstamos ni a refinanciaciones salvo que su poderío económico les aúpe por encima del resto de los mortales. Téngase en cuenta que en muchos casos la pareja arrastra una hipoteca pedida por los dos y pagada por los dos -normalmente-, por lo que, por un lado acceder uno de ellos solo a un nuevo préstamo hipotecario va a tener una doble traba: 1, los ingresos de uno son siempre menores que dos;
2, el ratio de endeudamiento del adquirente se dispararía exponencialmente.
Creo que es hora de alguien como tú, Nora, propicie encuentros virtuales en la Red donde cada cual aporte, en un proceso de brainstorming que podría durar dos o tres meses, concitando opiniones que yo sugiero vengan de cualquier sitio, en esa primera etapa, menos de economistas. Ya habría tiempo.

Anónimo dijo...

Hola Karlos
esta es una respuesta muy valiosa, te agradezco mucho tu propuesta...
Si tenemos algunas personas interesadas, yo voy a ofrecer el sitio donde charlar entre nosotros y cambiar ideas...A ver ahora quien se anima a participar?